Autor: Osiris Rodríguez Castillos
Vine al monte, porque dicen qu'está llenito 'e pitanga. - No es que ande en busca 'e silencio pa' sismar en mi desgracia...- Eso sí: dende hace un tiempo no tengo gusto pa'nada... Dejuro que algún mal di ojo me ha aventao las esperanzas... Y aquí voy; por el sendero desvirao en la barranca... - ¡Traigo los pasos barbudos de arrastrar las alpargatas!- Ya ves... dende que te juiste se m'hizo perdíz el alma y ando afinando un chiflido pa' ver si puedo pialarla. Ocasiones... se me añuda la soledad en la garganta ¡y entonces, soy un jilguero llorándote en la guitarra! Vine al monte... Pero, di a'nde viá vení por las pitangas, si ojalá me esté muriendo ni alzo las vistas p'hallarlas! Vine... a darle agua a los ojos; y truje esta pena zaina que vos dejaste potra, pa' ver si podia amansarla. ¡Malaya la pena bruta! ¡Velay la pena bellaca, me tiene enteco y sumido, puro talero y rodajas! L'otra vez, de puro gaucho la palenquié pa'ensillarla; ni bien le templé la cincha me desparramó las garras. Y... ¡de a'nde saltarla en pelo! La pena me ha güelto maula. Si hasta de a pié voy charquiando priendido de un chifle 'e caña.
