Letra: Manuel María Flores
Música: Antonio Tormo
I Adiós para siempre,__mitad de mi vida, C G7 C un alma tan solo teníamos los dos. G7 Mas hoy es preciso que esta alma divida la amarga palabra del último adiós. C ¿Por qué nos separan? ¿No saben acaso que pasa la vida cual pasa la flor? Cruzamos el mundo como aves de paso... Mañana, la tumba; ¿por qué hoy, el dolor? II ¿La dicha secreta de dos que se adoran E7 Am enoja los cielos, y es fuerza sufrir? E7 Am ¿Tan solo son gratas las almas que lloran F C al torvo destino?... ¿La ley es morir? G7 C ¿Tan solo son gratas las almas que lloran F C al torvo destino?... ¿La ley es morir? G7 C I (Bis) ¿Quién es el destino?... Te arroja a mis brazos. En mi alma te imprime, te infunde en mi ser, y, bárbaro, luego me arranca a pedazos el alma y la vida contigo... ¿Por qué? Adiós... es preciso. No llores... y parte. La dicha de vernos nos quitan no más; pero un solo instante dejar de adorarte, hacer que te olvide. ¿Lo pueden? ¡Jamás! II (Bis) Con lazos eternos nos hemos unido. En vano el destino nos hiere a los dos... ¡Las almas que se aman no tienen olvido, No tienen ausencia, no tienen adiós! ¡Las almas que se aman no tienen olvido, No tienen ausencia, no tienen adiós!