La ciudad de Punta Alta es la cabecera del partido Coronel Rosales y está en el extremo sudoeste de la provincia de Buenos Aires, a 673 km de Buenos Aires, y prácticamente a orillas de la Bahía Blanca, sobre el fondeadero de Puerto Belgrano. El gentilicio rosaleño se aplica a los habitantes del partido Coronel Rosales, y por extensión a los puntaltenses.
El indio Fermín es un personaje mítico de Punta Alta, aunque de existencia real. Su nombre era Fermín González Ancalao, pero se lo conocía como el indio Fermín, y quedó para siempre en la memoria de los puntaltenses que lo conocieron, como Mabel León, que cuenta lo siguiente:
...hacía muy bien el rasguido de la zamba y aunque no tenía casi voz, igualmente cantaba con su vocecita finita y melodiosa.
Era muy afectivo, para nada huraño y se había integrado perfectamente al blanco. No así su padre quien murió peleando por defender sus tierras y negándose a formar parte de esta civilización. Al indio Fermín lo recuerdo bajito, muy chueco, de pómulos salientes y usando unos anteojos redondos y chiquitos. Siempre llevaba un sombrero muy viejo, arratonado y con su guitarra al hombro recorría a caballo todos los lugares de Punta Alta, que en ese entonces no estaba aún asfaltada. Vivió más de cien años, aunque él no sabía decir con exactitud porque no poseía documentación. Completamente ciego, muchos años lo cuidó una señora con la cual se casó en una ceremonia a la que asistió mucha gente que se alegraba de corazón por este acontecimiento.
Letra y acordes de la zamba Mi zambita Rosaleña
Letra: Armando Pallotti Mozzoni
Música: Rubén Osvaldo Acosta
Si te canto Catamarca, Corrientes y Tucumán, a tí querida Punta Alta, también te quiero cantar. Yo te debía una zamba, y te la voy a ofrendar con toda la voz de mi alma, hermosa tierra natal. Tus médanos y rubios trigales, que ilumina el sol matinal, forman cuadros de bellos paisajes, con tus playas que besan el mar. Punta Alta mi tierra querida, solar de mi vida, no te he de olvidar. Bajo el cielo rosaleño el alba lo vio acampar al Indio Fermín un día, entre costas y arenal. Sólo una zamba nos queda, con suave brisa del mar, de clara noche estrellera, fragante y primaveral.
Clic en la imagen de abajo para ver la letra con acordes de la zamba Mi zambita Rosaleña. Luego haga clic con el botón derecho del mouse si desea imprimirla.
Mi zambita Rosaleña.