Letra y Música: Miguel Angel Morelli
Qué tristes son los domingos Am A7 Dm al ir cayendo la tarde, Am las venas del horizonte, E7 van derramando la sangre Am del día que llega herido, F E7 a morir bajo los sauces... Dm Am E7 Am Todas las cosas parecen, que mueren al mismo instante, cuando la tarde agoniza, en un silencio gigante, se vuelve eterno un minuto. cualquier domingo a la tarde. Qué tristes son los domingos, al ir cayendo la tarde. toda la angustia se prende de los cordajes del aire, y el duende azul del presagio, anda el domingo a la tarde.... El hombre no es mas el hombre, es algo más del paisaje, que ni siquiera comprende, si está muriendo o si nace, si debe haber fin del mundo, será un domingo a la tarde.